La pitaya o fruta del dragón es una fruta tropical. Consiste en una fruta dulce y con un alto porcentaje de agua, cuenta con diferentes variedades que se diferencian por sus llamativos colores.
Las más conocidas en España son: la pitaya con piel rosa y pulpa blanca, con pulpa rosa, o con pulpa púrpura, y la pitaya de piel amarilla y pulpa blanca.
Además, se trata de una planta con numerosas propiedades beneficiosas para nuestra salud.
Aquí vamos a hablar de su morfología, condiciones para su cultivo, como cultivarla y su cosecha y postcosecha.
1- Taxonomía de la pitaya y su origen

La pitaya es originaria de Centro América y el Caribe, de las zonas más tropicales. Pertenece a la familia Cactaceae, del género Hylocereus. Sus especies más conocidas son H. undatus y H. megalanthus. Pero como nombre común utilizamos: pitaya, pitahaya o fruta del dragón.
Además, la especie más cultivada es H. undatus. Aunque los agricultores expertos en el tema afirman que es más difícil que la variedad H. megalanthus.
2- Morfología de la fruta del dragón:

La pitaya o fruta del dragón es una planta perenne, terrestre y de porte rastrero debido a sus abundantes ramificaciones. Esta planta puede medir desde 0,5 metros, hasta 2 metros de altura.
La pitaya está formada por dos tipos de raíces: las raíces primarias que son las primeras que se forman, se encuentran en la zona superficial. Son más finas, su labor es la absorción de agua y nutrientes. El otro tipo de raíces, son las raíces secundarias o adventicias que se sitúan en la parte más profunda. Sirven para anclar la planta y sostenerla. Se recomienda comprar los esquejes de 1 y medio a 2 años de edad. Para que estén preparados para echar pronto raíces, unos 20-35 centímetros.

Los tallos de esta planta también son llamados vainas, son de color verde, con 3 aristas y rectas unidas por un eje.
Todos sus tallos cuentan con areolas, donde formas espinas de unos 2 a 4 milimetros, se consideran hojas mordificadas. De esas aerolas se forman nuevos tallos o flores. Los tallos de este vegetal forman parte de la fotosíntesis y trabajan como reguladores hídricos.
La planta de la fruta del dragón, cuenta con flores hermafroditas de 15 a 30 cm de largo. Los principales colores de la flor son: el blanco, blanco amarillento o blanco rosado. Es una especie peculiar, puesto que sus flores son de noche y se enfocan mirando la luna.
En ocasiones se dan entre 5 y 6 floradas. A veces coinciden con varios estadíos fenológicos. Aunque otras veces se necesita polinización cruzada, por mucho que sean auto fértiles.

El fruto de la pitaya es una baya ovalada, de colores rosa o amarillo, su tamaño es de entre unos 6 y 12 cm de diámetro. En la parte exterior, la mayoría de las especies cuentan con una epidermis carnosa y unas brácteas verdes y triangulares.
En el caso de las pitayas amarillas son espinas. El interior se encuentra formado por una pulpa translúcida con numerosas semillas. La pulpa puede variar de color dependiendo de la especia.
La mayor parte de las pitayas tienen pulpa blanca pero también hay color púrpura.
3-¿Qué condiciones necesitamos para su cultivo?
Las temperaturas: para producir pitahaya se necesitan climas cálidos y subhúmedos. También es posible cultivarla en climas secos. Sus temperaturas ideales oscilan entre 16 y 25ºC, no son convenientes las temperaturas bajas y menos las heladas.
Además, es delicada con las temperaturas altas, más de 36- 38ºC. Pueden ser perjudiciales y quemar la planta.
En España se cultiva por Andalucía, Murcia y Comunidad Valenciana, pero en invernadero, protegiendo del frío en invierno y del sol con sombra en verano.
La luminosidad: la luz es importante para el crecimiento de la flor de la pitaya y el crecimiento de su fruto. Una alta iluminación en necesaria para el desarrollo de sus procesos fisiológicos.
Pero una radiación directa a la planta, la puede quemar. Es correspondiente que tenga algo de sombra.
Sobre todo, en los meses de más sol, un 30% aproximado de sombra. Puesto que mucha sombra dificultaría su proceso fisiológico y reduciría su producción de frutas.

El terreno: la planta de fruta del dragón es rústica, puede adaptarse a diferentes terrenos.
Prefiere los suelos franco-arenosos, con humedad, sensibles a encharcamiento, con abundante materia orgánica y un pH levemente ácido (entre 5´5 y 6´5 de acidez). Aunque se adapta a tierras secas, pedregosas y pobres.
El agua: la pitahaya no necesita un riego abundante. Los dos primeros años es conveniente regar regularmente la planta para su desarrollo de raíces y crecimiento. Pero una vez pasada esta temporada, sólo se les aporta agua en épocas de floración.
Nunca se debe regar en épocas de sequía, puesto que la planta está acostumbrada a este factor, y disminuiría su floración y producción.
4- ¿Cómo cultivar la pitaya o fruta del dragón?
Aquí te lo mostramos por pasos:

- Preparación del terreno: se debe comenzar un mes antes de la siembra. Primero labrar el campo para airear el suelo y soltar la tierra, de esta forma será más fácil el crecimiento de las raíces.
- Por otro lado, es conveniente el abono de esta para que se encuentre rica en nutrientes. Además de un análisis de la tierra para comprobar, si se encuentra todo en orden.
- Siembra o plantación: se suele dar en invierno, pero si se realiza en temporada seca, se recomienda el riego abundante antes y después de la plantación de los esquejes. De esta forma reducirá el efecto de la calor y conservará la humedad.
Puedes plantarlo en semilla, esqueje o la planta. Todo esto lo puedes encontrar en Amazon y en viveros.
Este vegetal necesita unas estacas para sostener la planta una vez crece, suelen ser de unos 3 metros de alto y una distancia entre pitayas de 1,5 metros.
En producciones intensivas suelen realizar los soportes metálicos en forma de red, a un lado de la planta de pitahaya.
Los soportes se llaman tutores y pueden ser vivos o inertes, los vivos son que se sostienen en otros vegetales y los inertes en maderos o redes metálicas.
Estos últimos son más utilizados en producciones.
Hay 3 tipos de sistemas de tutorado.
- Tutor tradicional, es un tutor junto a la planta que haga de soporte, de unos 10cm de diámetro, 3 metros de alto y con fuerza para sujetarla.
- Tutor de espaldera tradicional, son soportes separados cada 3 metros y de 3 m de altura. Estos unidos por dos alambres que crucen entre poste y poste, uno a 50 cm de altura y otro a 2,5 metros de altura.
- Los alambres deben estar cubiertos por manguera para evitar dañar la planta.
- Tutor en T, se utilizan postes de 3 metros y cruza otro madero a 2 metros de altura aproximadamente, de forma perpendicular. De esta forma de sujeta y facilita la recolección.
En el siguiente post comentaremos la poda y cosecha de la pitaya o fruta del dragón.
Buen artículo 👏🏼
Gracias!!!